Llevaron a una perra para sacrificarla, pero un recluso le dio un fuerte abrazo

Los cabilderos de mascotas salvaron a una mascota llamada Esther de un asqueroso criadero de cachorros. ¡Era evidente que Esther había sido ignorada y maltratada y aislada de una manera extremadamente severa, ya que trataba de esconderse cuando veía a la gente!

Sin embargo, cualquier perro con un caso como Esther generalmente es sacrificado, pero los rescatistas vieron que podían conservarla.

Llamaron a un programa llamado “Programa de acompañantes K-9 entrenados en prisión”, que se entiende que permite a los reclusos trabajar con la restauración de los casos más terribles de abuso de mascotas.

El interno que estuvo a cargo de la recuperación de Esther fue Jason Mayo. Jason hizo un trabajo maravilloso al educarla para que fuera leal.

Esther siempre fue recompensada con mimos y también con besos, lo que le dio un papel maravilloso en su recuperación.

La buena noticia es que se transformó por completo en un perro que ama a la gente.

¡Ese fue el punto de inflexión en su vida, ya que fue asumida por una gran familia!

Disfruta del videoclip que se detalla a continuación.

Comparte esto con tus amigos y familiares.

Leave a Comment