Este pequeño cachorro, ahora llamado Joao, fue víctima de una crueldad extrema durante toda su vida. Estaba hambriento, descuidado, sin amor y olvidado, escribe amo mucho a mis perros
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Cada costilla y hueso sobresalían de su diminuto cuerpo mientras se tambaleaba, tratando de valerse por sí mismo.
Cuando el personal del refugio lo encontró, sabían que tenían que acogerlo, sin importar si tenían el espacio o no. Afortunadamente lo hicieron y comenzaron a tratarlo de inmediato.
Además de estar severamente desnutrido, Joao también estaba anémico, tenía la boca amoratada, el cuerpo cubierto de heridas y seguía teniendo diarrea y vómitos.
A medida que lo seguían tratando, comenzó a comer solo, lo que era una buena señal de que estaba luchando.
Después de recibir la mejor atención de los veterinarios durante todo el día, el pequeño cachorro siguió luchando y demostrando que todos estaban equivocados.
Fuente: ilovemydogsomuch.tv